Narcotráfico y política

El crimen organizado ha dominado el estado de Tamaulipas a tal grado, que tres ex gobernadores han sido vinculados con ellos y el actual no los enfrentó

01/04/2016 | AGENCIA REFORMA
Ciudad de México


Estado marcado por la violencia del crimen organizado, Tamaulipas es también un bastión del PRI.Hace seis años, en plena campaña por la gubernatura, fue asesinado el candidato priista Rodolfo Torre Cantú. Y su hermano Egidio, a sólo seis días de los comicios, fue postulado y obtuvo la gubernatura.

Los tres gobernadores que antecedieron a Torre Cantú -Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández (de 1993 a 2010)- han sido investigados por sus posibles vínculos con el crimen organizado. Y al mandatario saliente se le achaca no enfrentar a los cárteles del narco. Ni siquiera pudo esclarecer el asesinato de su hermano.

En 2012 se abrió un expediente en el que Yarrington fue investigado por el FBI por cargos de crimen organizado y lavado de dinero; se presume que como gobernador habría recibido sobornos del Cártel del Golfo; además de él, la investigación incluyó a Cavazos y Hernández. A Yarrington, el PRI le suspendió sus derechos, pero ninguno fue detenido.

El control del Estado es clave para el narcotráfico (disputan la entidad el Cártel del Golfo, el de Sinaloa y Los Zetas). La frontera tamaulipeca de 400 kilómetros con Estados Unidos, la más cercana del sur con territorio estadounidense, hace más barato y accesible el traslado de mercancía, legal e ilegal, al país del norte.

Dominio tricolor

En paralelo al crecimiento del narco, el PRI ha dominado políticamente la entidad. Nunca ha perdido la gubernatura, ni la mayoría del Congreso local.

Sólo en 2012 sufrió un revés: el PAN obtuvo 41.7 por ciento en la elección presidencial, rebasando a la alianza PRI-PVEM, que sólo consiguió el 34.5 por ciento. Tamaulipas fue uno de los pocos estados donde Josefina Vázquez Mota derrotó a Enrique Peña Nieto.

Al año siguiente, el PRI perdió ayuntamientos importantes que quedaron en manos del PAN: Matamoros, Nuevo Laredo, Mainero, Mier, Miguel Alemán y Miquihuana. Sin embargo, el tricolor logró 36 de las 43 alcaldías.

Y, en las elecciones federales de 2015, el PRI se recuperó; sumó casi medio millón de votos y 43 por ciento de los sufragios.

Para estos comicios, los punteros son Baltazar Hinojosa Ochoa, postulado por la coalición PRI-PVEM-Panal; Javier García Cabeza de Vaca, por el PAN y Francisco Chavira Martínez, candidato independiente.

Disputa electoral

El priista es considerado cercano al secretario de Hacienda, Luis Videgaray. Como diputado, Hinojosa presidió la Comisión de Presupuesto en San Lázaro; antes, coordinó la campaña de Peña Nieto en el norte del país.

Alejandro Etienne, alcalde de Ciudad Victoria, era el precandidato tricolor que encabezaba las preferencias a nivel local, pero los apoyos de Hinojosa a nivel nacional lo dejaron en el camino.

Una fractura del priismo local podría abrirle una oportunidad a la oposición. Pero el PAN, que es la segunda fuerza política, postuló a un candidato -García Cabeza de Vaca- señalado por presuntos vínculos con el crimen organizado. Y el independiente, Francisco Chavira, enfrentó un proceso penal en 2012, cuando militaba en el PRD.
La disputa electoral estará marcada por las acusaciones de vínculos con el narcotráfico y por los temas de seguridad y violencia.
El pasado miércoles, un grupo de 900 elementos del Ejército arribó a Tamaulipas como parte de un operativo tras algunos incidentes violentos registrados durante marzo.


Los tres gobernadores que antecedieron a Torre Cantú -Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández (de 1993 a 2010)- han sido investigados por sus posibles vínculos con el crimen organizado